domingo, 28 de enero de 2018

Tal día como hoy...


Tal día como hoy, hace ya seis añitos (¡fiera!), Julio y el que suscribe participamos por primera (y no última) vez en la Clásica de Valdemorillo, la prueba MTB más antigua de España. Lo largo de la crónica (que quien tenga paciencia puede leer aquí: Clásica de Valdemorillo. ¡Ahí estuvimos!) denota el entusiasmo de los comienzos de MNBC. 

Han pasado seis años y ya no nos entusiasman tanto las carreras; y de hecho yo ya dije que "¡Me he quitao!" y que "De las carreras también se sale"; pero es verdad que echamos muchas risas teñidas de nostalgia cada vez que hablamos de aquellos tiempos. Es lo que tiene la memoria: que es selectiva, que da relieve a lo bueno y difumina lo malo... ¡Menos el frío horroroso que pasamos en la salida de Valdemorillo! De eso tengo un recuerdo nítido. 

¡¡Qué frío pasamos en la XXI Clásica de Valdemorillo!!

sábado, 20 de enero de 2018

El prejubiker

A R.G.M.,
desde el cariño
y la admiración ;-)

El prejubiker viene a ser a la fauna biker lo que la mosca cojonera es al reino animal. Lo cierto es que en MNBC no supimos de la existencia de este espécimen sobre ruedas hasta que uno de nuestros más destacados miembros se prejubiló el año pasado, en plenitud de facultades biker.  

El principal problema que tienen los prejubilatas es el exceso de tiempo, que lleva al aburrimiento, que lleva a darle demasiado al coco, que lleva a idear continuamente modos y maneras de tocar las pelotas a sus compañeros de fatigas MTB (y supongo que también a miembros de otros colectivos en los que se encuentre integrado). Con el paso del tiempo, el tocapelotismo ejercido por los prejubikers alcanza unas cotas de refinada crueldad que uno jamás hubiera sospechado en quien otrora fue esa sonrisa amable en las cuestas, esa mano amiga que te proporcionaba una cámara cuando pinchabas, ese buen samaritano que siempre tenía una barrita energética cuando te daba la pájara...

¿Acaso no raya en el sadismo enviar fotos del mirador de Valdelaganar (como la que ilustra esta entrada) en un día laborable, a las doce de la mañana, a uno que lleva varias horas comiéndose marrones en su puesto de trabajo? ¡No hay derecho, hombre! Y encima te dice que, de vuelta, parará a tomar una cervecita y unas tapitas en algún establecimiento del barrio (como el del logo que ilustra esta entrada) para aprovechar que en esos días y a esas horas nunca hay que esperar a que te sirvan... ¡Será posible!

Alguno ha dicho que el problema es que a los demás nos corroe la envidia. Yo creo que ese no es el problema..., pero, ¿y si sí?


domingo, 14 de enero de 2018

Artistas locales

No seré yo quien haga aquí una apología del vandalismo grafitero, ni justifique el que se pinte en paredes en las que no se debe pintar. No. Soy de los que piensa que quien hace eso debe pagar por ello (además de limpiar la pared, claro). Dicho lo cual, es cierto que no está muy claro dónde acaba el gamberrismo y dónde comienza lo que se ha dado en llamar street-art o arte urbano. Pero yo no voy a entrar aquí en este debate.

Esta entrada viene a cuento de que los bikers de MNBC atravesamos con muchísima frecuencia por el túnel que pasa por debajo de la M-40, camino de El Pardo, Colmenar..., el del Camino de Santiago de Madrid, para más señas. Y allí, en lo que en su día era solo un anodino muro gris, hoy puede uno admirar diversos murales realizados por artistas locales, que van renovándose con el tiempo y que no dejan de tener su gracia. Algunos de ellos, muy currados.

Lo que sigue es una muestra de algunas de las obras que se pueden admirar en el Museo de Arte Urbano del Túnel de la M-40.

¡Que lo disfrutéis!

"Atemporal" (Espray sobre hormigón)


"Danza de la lluvia en Madrid" (Espray sobre hormigón)


"Ilusión intergaláctica" (Espray sobre hormigón)

domingo, 7 de enero de 2018

Año nuevo, espíritu nuevo

Primera salida MNBC de 2018 (2 de enero)
Aunque pasar una hoja de calendario no cambia nada, sí es verdad que el final de un año y el comienzo de otro invita a la reflexión. Y bien sea porque el que suscribe se va haciendo mayor, bien sea porque un par de acontecimientos me han invitado a ello, o porque, como a los Celtas Cortos en su 20 de abril del 90, "me entró la melancolía y te tenía que hablar" (o escribir, a los efectos), el caso es que en esta primera entrada del año me he puesto un tanto filosófico.


El primer acontecimiento de 2017 que me ha dejado bastante "tocado" es la marcha al cielo de Andrés, el amigo que me introdujo en este apasionante mundo del MTB hace más de un cuarto de siglo, con el que compartí muchos cientos de kilómetros de bici y con el que hice un inolvidable Camino de Santiago en 1993. Disfrutón donde los hubiera, de Andrés aprendí, entre otras muchas cosas, a sacarle el jugo a cada momento de la vida y a agradecer cada instante de felicidad, cada paisaje, cada momento de amistad compartida... Siento que, desde la dimensión en la que se encuentra ahora, me lo está susurrando y me recuerda que la vida en la tierra no es más que el aperitivo.
VII San Silvestre Biker MNBC sobre fondo de skyline madrileño neblinoso

El segundo acontecimiento fue la VII San Silvestre Biker MNBC, en la que participamos once niños y seis adultos. Repito, no sé si fue que ya me estoy haciendo mayor o que me entró la melancolía o que Andrés me lo susurró, pero lo cierto es que me enterneció la capacidad de asombro de los niños, que con un recorrido poco emocionante, con unas bicis de medio pelo y con bastante frío, disfrutaron como enanos -valga la redundancia- y empezaron a preguntar para cuándo la siguiente.

Esos niños nos han dado una buena lección, y nos están enseñando que el suyo es el verdadero modo de vivir la vida con intensidad, que debemos reírnos de nosotros mismos y mirar todo con ojos y espíritu nuevo.

Acabo con un poema de Miguel de Unamuno que ha circulado por WhatsApp en estos días y que sintetiza magistralmente lo que intento decir:

Agranda la puerta, Padre,
porque no puedo pasar;
la hiciste para los niños,
yo he crecido a mi pesar.
Si no me agrandas la puerta,
achícame, por piedad;
vuélveme a la edad bendita
en que vivir es soñar.

Participantes en la VII San Silvestre Biker MNBC