domingo, 28 de octubre de 2012

¡Estuvimos en la Imperial!

Estuvimos Julio, Gladihéctor, Eduardo, Diego y el que suscribe. ¡Y disfrutamos como bikers! Lo que sigue es el relato de mi marcha. Las de los demás fueron bastante bien, salvo pinchazo y caída sin consecuencias de Eduardo. 


Dicen los taurinos que “no hay quinto malo”. Por lo visto, el dicho viene de que, para evitar que la gente se marchara de la plaza antes de que acabara la corrida, los ganaderos sacaban en quinto lugar el mejor toro. La cuarta del MTB 4XESTACIONES -aunque no hay quinta ni sexta, como en los toros- ha sido disfrutona y bonita donde las haya. Sol radiante, un cierto viruji que no llegó a mayores -nada que ver con el frío salvaje de Valdemorillo- y un recorrido que podría incluirse en un libro de rutas biker con encanto.  Y además, salida y final en un pueblo donde la mano del hombre se ha lucido con un conjunto arquitectónico espectacular que no desdice de lo espectacular del entorno natural. 

Pero bueno, al lío. Empezamos -la primera en la frente- con el mítico puerto de Abantos, donde, en tiempos, Roberto Heras sentenció una vuelta a España. Como no soy un biker muy científico que digamos, no me suelo estudiar demasiado los perfiles antes de la marcha; y, además, Abantos no lo había subido nunca... Dicho lo cual, empecé en el kilómetro diez con un monólogo interior que no me suele venir al magín hasta el kilómetro cincuenta, o incluso más, dependiendo de la marcha: “Que quien me manda meterme en estas movidas, que ya me lo dice mi mujer, que te podías haber ido a la de cuarenta y cinco con tus amigos Julio y Héctor, que no aprendes nunca, que mira que eres cabezón...”. Afortunadamente, contraatacó el biker que todos -bueno, todos los que le estamos enganchados a este deporte- llevamos dentro: “Tío, más duro que esto ya no va a haber, mira que suerte que te lo han puesto al principio...”. Al llegar arriba, charcos congelados con una capa de hielo de un centímetro de espesor dan argumentos al antibiker que -desgraciadamente- también llevamos dentro: “Si es que estáis chalaos: el mes pasado al borde de la deshidratación en Las Rozas y ahora esquivando charcos congelados”. Ni caso, yo sigo: entramos en Ávila, la cosa empieza a descender y las vistas compensan con creces el esfuerzo. 


Bajada para ir -me refiero a mí mismo- con cuidado: bicicleta rígida, alguna galleta interesante en mi historial y... en fin, que uno ya va teniendo su edad, que es padre de familia y que no tiene que demostrar nada... El vadeo de ríos no ha sido para tanto, aunque, por mucho que se pasen sin desmontar -que se pasan-, los pies se mojan algo. El recorrido cada vez más bonito. Entre el segundo y tercer avituallamientos, senderos entre pinos para reportaje de revista. Llegamos a Robledo de Chavela, que dejamos a la derecha. El olfato me recuerda el terrible incendio y veo el terreno quemado que llega hasta las casas. Como una especie de símbolo del compromiso que los bikers tenemos con el cuidado de esa naturaleza que nos fascina, veo una cinta amarilla de baliza anudada a lo que queda de un tronco de pino quemado y la hierba que empieza a teñir de verde la tierra que ennegreció el fuego.

Sigo, kilómetro cincuenta y dos, las fuerzas empiezan a ir justas. Una sonriente voluntaria nos informa de que quedan dos kilómetros (¿?)... ¡para el avituallamiento! Muy bien porque me estoy quedando sin líquido. Los dos kilómetros acaban siendo cuatro... (psicológicamente, ocho... o diez). Entro en el último tramo de la carrera, después de reponer fuerzas. Me sorprende ver un montón de bikers por delante, cuando he ido solo gran parte del camino: son los más rezagados de la ruta de cuarenta y cinco. Paso a unos cuantos, lo cual no deja de ser bastante motivante. Llego a la calzada romana: ¡cómo se nota que los romanos no tenían bicicletas! Giro a la izquierda, otro sonriente voluntario: “Queda como un kilómetro”, nos dice. “Ya serán cuatro”, me digo. La verdad es que el cuenta kilómetros me marca sesenta y nueve, pero debe de andar un tanto desajustadillo, porque cuando llego a la meta me marca setenta y dos. Siempre me hace lo mismo, ¡y no mola nada!

Cuesta final, la gente que pasea te anima, un niño dice: “Vamos, que ya solo queda una cuesta brutal”. “¡Calla, niño!”, pienso. ¡¡Conseguido!!: “bolsa de chuches” (pistachos, manzana, barrita...) y maillot del MTB 4XESTACIONES (¡qué chulo!).

Vuelta en coche a Madrid. ¿Cuál será la próxima? Espero que en la siguiente mis paranoias empiecen a partir del kilómetro sesenta.

domingo, 21 de octubre de 2012

¡Feliz cumpleaños, Biketown!



Biketown ha cumplido dos añitos. Y para celebrarlo han organizado una salida por el terreno que mejor  conocen: el monte de El Pardo. La capacidad de convocatoria de Biketown ha quedado fuera de toda duda porque nos hemos juntado unos cuarenta bikers. Y la capacidad de Javi, Raúl, Jose y Alex de organizar recorridos espectaculares por los senderos de El Pardo también ha quedado fuera de toda duda. Nos han llevado por algún sitio por el que, cosa difícil, todavía no habíamos pasado en nuestras salidas de MNBC. 

Hemos disfrutado, hemos podido departir con bikers a los que hacía tiempo que no veíamos y..., todo hay que decirlo, ¡¡nos hemos perdido las birras a las que ha invitado Biketown en la taberna de Jarete!! Había   compromisos y nos tuvimos que volver antes. No se puede tener todo... En fin, que la próxima vez será. 

¡Feliz cumpleaños y larga vida para Biketown!





miércoles, 17 de octubre de 2012

Para muestra, un botón


En MNBC llevamos tiempo diciendo que tenemos que publicar en el blog fotos de los maravillosos rincones del monte de El Pardo que recorremos con nuestras bicicletas. También hablamos de un proyecto más ambicioso que constituiría una especie de sección del blog y que titularíamos algo así como "Rincones biker con encanto", o "Rutas biker con encanto". En fin, que todo se andará, que si Dios nos da salud, hay MNBC y blog para rato, y que, como dice un amigo mío, hay más días que longanizas.

El caso es que siempre decimos que vamos a llevar la cámara y a hacer la rutita con tranquilidad. Pero, unos por otros, siempre se nos olvida la cámara y, además, siempre hay quien se encarga de tensar la carrera y que de tranquilidad nada. Normalmente, los demarrajes los inicia Gladihéctor. Reproduzco a continuación el típico diálogo que sigue a los intentos de escapada:

-Qué, Héctor, ¿ya te has dopao? ¿Qué has tomado para desayunar?
-¡Hay que ver cómo os jode que vaya tirando! -suele decir Héctor.
-Poj bueno, poj vale... Te vamos a mandar a Geyperman (Julio) y a Madelman (el que suscribe) para que se te peguen a rueda -dice Pablo, que tiene una coña madrileña muy puñetera y que es el responsable de los apodos "Geyperman" y "Madelman".
-A rueda, a rueda... Os voy a marcar la cubierta en la espalda -contesta Héctor. Y es que lo de Gladihéctor, además de por la corpulencia, le viene de una especie de espíritu legionario que le invade de vez en cuando.
-Vale, vale, no te pongas violento, que somos bikers pacíficos.

Y así seguimos pegando la hebra a ritmo de pedaladas, jadeando y echando muchas risas. Pero bueno, algún día llevaremos la cámara y publicaremos fotos de rincones biker con encanto. De momento, Eduardo -que habla poco y pedalea mucho- nos ha pasado el track de la última salida. Sirva, pues, de botón de muestra de las salidas que hacemos los domingos. La del domingo pasado es una salida típicamente "pardeña": rompepiernas, disfrutona y con abundante fauna (jabalíes, ciervos, gamos, bikers...). Ahí va:


Como siempre, Eduardo, ¡¡muchas gracias!!


jueves, 11 de octubre de 2012

Algunos ya nos hemos inscrito

Hoy ha llegado a la redacción de MNBC el correo de Eduardo, que me dice que ya se ha inscrito en la Ruta Imperial. Ya somos dos. Hay unos cuantos bikers más de MNBC que dicen que van a ir, aunque todavía no se han apuntado. Estamos en España, donde es tradición inveterada dejar todo para última hora... No lo recomiendo, porque en el Festibike ya hubo quien se quedó fuera. Además, de entre las marchas consolidadas, esta es de las últimas antes de que el tiempo empeore de verdad. Lo digo porque quizá sea el último acto del año para muchos oso-bikers que después se retiran a sus cuarteles de invierno a esperar la llegada de la primavera. Preveo, pues, que puede estar la cosa concurrida y que habrá quien se quede sin dorsal (bueno, no lo sé, pero es para picar a alguno que se lo está pensando mucho...).

Embalse de Peguerinos
Como siempre, algunos bikers de MNBC nos acercaremos a El Escorial la víspera para recoger los dorsales y, como siempre, nos ofrecemos a traerle el dorsal al que quiera. Y, como siempre, quedaremos con nuestros amigos de Biketown para ir juntos el domingo.

¡Contamos contigo!


sábado, 6 de octubre de 2012

Buenas noticias

Fernando nos envía el enlace a una buena noticia para los ciclistas: la nueva ley de la DGT, que favorece el respeto debido a los que circulamos en bicicleta por vías por las que también circulan vehículos de motor. No es que a los bikers nos entusiasme frecuentar las carreteras, pero es cierto que rara es la ruta que no incluye algún tramo que hay que compartir con otro tipo de vehículos. Buenas noticias, pues. Bienvenidas sean.


¡Y muchas gracias a Fernando por la información!