El otoño es, sin duda, una de las mejores estaciones para la práctica del MTB. Los rigores estivales ya han pasado, los rigores invernales no han llegado y la lluvia hace acto de presencia para mejorar sustancialmente el terreno y el agarre de nuestras bicicletas.
En fin, que en los recuerdos de nuestras mejores rutas a menudo está presente la luz amable del sol de otoño (¡qué poético!). Y para muestra, un botón; porque ayer, sin ir más lejos, en uno de esos días espectaculares que nos brinda el otoño se celebró la primera MNBC Cercedilla Inverse del curso. A la belleza que la Sierra de Guadarrama suele gozar por estas fechas, hubo que añadir la presencia de las primeras nieves en las cimas de las montañas. Se promete un otoño ciertamente bello.
¡Aprovechadlo, bikers!
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